¿Fin al principio end-to-end?
Desde su nacimiento, Internet o "la red de redes" tal como la llama Paul David, se ha visto beneficada por su estructura descentralizada. Otros factores constitutivos que menciona son: el protocolo IP, las herramientas de Email que permite la transferencia de archivos y los buscadores "www". Esta arquitectura ha hecho posible la constante innovación de software y hardware por millones de personas conectadas alrededor del mundo. David hace un recorrido por las diferentes fases de Internet y argumenta como es lógico que en los principios no se haya hecho incapie en cuestiones como privacidad o seguridad personal. El autor señala como la organización de Internet avanza sobre las juridicciones nacionales y otros tipos de controles y legislaciones.
Sin embargo, en la segunda parte de su trabajo el autor analiza la necesidad de establecer mecanismos de control en la red. David observa como el desarrollo "no - controlado" de Internet ha tenido como consecuencia problemas sociales y económicos. De allí la necesidad de imponer límites a la estructura descentralizada de la red. La apertura a interconexión con dominios de otras telecomunicaciones públicas es un ejemplo de este crecimiento descontrolado. Es aqui donde señala que el ponerle fin al principio "end to end" no proviene de organismos estatales, sino de sectores privados, como por ejemplo grandes empresas. Es por ello que el autor señala que es necesario que haya una coordinación de mecanismos tecnológicos e institucionales en pos de preservar las ventajas de la estructura descentralizada, y erradicar las desventajas. Para argumentar la importancia de una buena coordinacion entre sectores tecnologicos y sectores instucionales el autor ejemplifica casos extremos. Tal es el caso de China, donde mecanismos de control como "firewalls" y filtros han sido impuestos desde instituciones estatales dejando asi a los usuarios sin voz ni voto. Una de sus propuestas es basarse en modelos legales pensados para avances en las telecomunicaciones, los cuales fueron exitosos y tuvieron alcance internacional.
Sin embargo, en la segunda parte de su trabajo el autor analiza la necesidad de establecer mecanismos de control en la red. David observa como el desarrollo "no - controlado" de Internet ha tenido como consecuencia problemas sociales y económicos. De allí la necesidad de imponer límites a la estructura descentralizada de la red. La apertura a interconexión con dominios de otras telecomunicaciones públicas es un ejemplo de este crecimiento descontrolado. Es aqui donde señala que el ponerle fin al principio "end to end" no proviene de organismos estatales, sino de sectores privados, como por ejemplo grandes empresas. Es por ello que el autor señala que es necesario que haya una coordinación de mecanismos tecnológicos e institucionales en pos de preservar las ventajas de la estructura descentralizada, y erradicar las desventajas. Para argumentar la importancia de una buena coordinacion entre sectores tecnologicos y sectores instucionales el autor ejemplifica casos extremos. Tal es el caso de China, donde mecanismos de control como "firewalls" y filtros han sido impuestos desde instituciones estatales dejando asi a los usuarios sin voz ni voto. Una de sus propuestas es basarse en modelos legales pensados para avances en las telecomunicaciones, los cuales fueron exitosos y tuvieron alcance internacional.
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